Los otros protagonistas de la Maratón: Estefanía Bolzan
La Primera
Maratón Internacional de Mediación, celebrada en Madrid, durante los
días 29 y 30 de septiembre de 2014, en la Facultad de Derecho de la Universidad
Nacional de Educación a Distancia (UNED), ha tenido muchos
protagonistas. Estefanía Bolzan fue,
además, imprescindible.
Has sido el nodo central en el
desarrollo de la reciente Primera Maratón Internacional de Mediación. Dinamizadora,
conductora, en cierto modo “arbitro” de las pruebas. Sin duda agotador. ¿Qué
impresiones se lleva una mediadora profesional en estos días de intensa
actividad y convivencia con tantas y tan diversas personas llegadas de tan
diferentes lugares?
En primer lugar agradecer al Programa modular de Mediación UNED y la Fundación UNED por contar conmigo para desarrollar el
I Maratón de Mediación Internacional, hacen una gran labor apostando por la
mediación, siendo un procedimiento para la resolución de conflictos aún
desconocido en el que queda mucho por descubrir y ampliar. Personalmente,
encontrarme con un equipo como el que el formamos durante dos días, con
personas procedentes de diversos lugares del mundo, para mí ha sido una
experiencia enriquecedora y he disfrutado muchísimo en todas las sesiones. Mi
impresión es que todos los participantes son ya grandes mediadores y la
mediación poco a poco va tomando el lugar que se merece en la sociedad.
Marián Garjón y María de Araoz, han resultado las
ganadoras de la competición, en opinión mayoritaria de sus propios compañeros y
contrincantes, pero, ¿qué valoración realizas tú como responsable del trabajo
de todos los grupos en su conjunto? ¿Qué destacarías más?
Ante todo, tengo que destacar que todos los
participantes estuvieron increíbles y me sorprendió la espontaneidad de cada uno
de los grupos y como supieron afrontar cada caso. Las pruebas no eran para nada
fáciles y supieron enfocar su papel dentro del “role-play” de una manera
extraordinaria. Debo felicitarles a todos. En especial, como no, a las
ganadoras Marián Garjón y María de Araoz, que demostraron una valía, una gran
formación y preparación. Si tuviese que concretar, diría que Marián Garjón, que
realizó la función de una mediadora en la sesión informativa, tiene unas
cualidades de expresividad muy positivas y naturales, sabe controlar la
situación cuando hay conflicto y demostró tener un gran conocimiento en la
materia. Y, por otro lado, de María de Araoz, que hizo de mediadora en el
cierre de acuerdo, destacaría su conocimiento en la utilización de las técnicas
y herramientas que un mediador puede aportar a la hora de intervenir un
conflicto, tiene muy asumidos los valores y principios que se tienen que
desarrollar en un procedimiento de mediación y los transmitió con creces.
En mi opinión, insisto, todos hicieron un gran trabajo.
A pesar de la dificultad de trabajar
muy diferentes ámbitos de mediación y de la idiosincrasia particular de cada
persona mediadora, ¿has podido detectar alguna pauta que –para bien o para mal-
se repita, como tendencia general, en la puesta en práctica de las técnicas,
habilidades y protocolos aplicados?
En general, sí que se pueden observar técnicas o
habilidades en relación al ámbito profesional al que perteneces. Por ejemplo,
los profesionales que desarrollan actividades concernientes al mundo de la
psicología o la labor social, considero que despliegan más herramientas para
aplicar su capacidad empática y neutral, por ejemplo. Por otro lado,
profesionales que están acostumbrados a las negociaciones u otros ámbitos de
resolución de conflictos, aportan un manejo del lenguaje verbal y no verbal
extraordinario. Sin embargo, también considero que en mediación debemos ampliar
nuestros conocimientos más allá de la rama profesional a la que pertenecemos y
que de cierta manera tenemos atribuida.
Aun tratándose de un conjunto de participantes de
diferentes formaciones de origen, profesiones y distintos grados de experiencia
como mediadores, la mayoría han coincidido en señalar –de acuerdo con la
encuesta de valoración- el “enfoque hacia futuro” como técnica utilizada de
forma insuficiente por las personas en el rol de mediador, junto con la “contra
argumentación” y la “emisión de juicios de valor” como errores más habituales
en la praxis desarrollada. ¿Coincides con esas apreciaciones o destacarías
alguna otra?
Lo cierto es que a “grosso modo” todos coincidimos
en la apreciación de esos tres aspectos durante la evaluación, son errores
comunes que se solventan con la práctica, tenemos que tener en cuenta que el
proceso de mediación se desarrolla en varias sesiones que nosotros no pudimos
realizar por cuestión de tiempo, donde probablemente se hubiese dado mayor
importancia al “enfoque hacia futuro” y la “contra argumentación”. Por otro
lado, hay errores más etéreos que pueden pasar desapercibidos, pero son igual
de importantes, como el manejo del lenguaje y la expresividad o no saber
diferenciar lo que es una negociación de una mediación. La “emisión de juicios
de valor” es un concepto que un mediador no se puede permitir e insistimos mucho
en ese aspecto durante las sesiones, no debemos olvidar nunca que un mediador
es absolutamente neutral e imparcial.
Todos los casos trabajados, a salvo de
las lógicas protecciones de identidad e información sensible o personal,
estaban basados en casos reales de tu archivo profesional. Las soluciones,
abordajes, y enfoques ofrecidos por los diferentes grupos de trabajo, en las
diferentes fases del procedimiento, ¿han coincidido con los desenlaces reales
de los casos? ¿Te ha sorprendido, particularmente, alguno en concreto?
He
disfrutado muchísimo observando cómo, a medida que íbamos pasando cada fase, se
iban enfocando los casos. Estoy muy satisfecha con el trabajo que han
realizado. Me ha sorprendido gratamente la capacidad de resolución y no solo
eso, sino las soluciones aportadas. En líneas generales, las soluciones de
algunos casos se asemejaban bastante a las opciones adoptadas por mi equipo de
mediadores. Aunque, pudimos observar incluso que, habiendo dos grupos con el
mismo caso, las medidas conclusas eran diferentes, lo que destaca un aspecto
muy importante en mediación, que es el amplio abanico de posibilidades y
soluciones que existe para las partes a la hora de determinar un acuerdo.
Estefanía
Bolzan Villar del Saz, es
licenciada en Derecho por la Universidad de Alicante. Compaginando sus
estudios universitarios, inició su trayectoria laboral como asesora jurídica en
diversas empresas dentro del sector industrial y medioambiental. A nivel
profesional ha colaborado en diversos despachos de abogados especializados en
derecho civil, concretamente en familia y propiedad horizontal. Especializada
en mediación civil y mercantil a
nivel nacional e internacional por
la Universidad de Lérida, en la actualidad se dedica en exclusiva a la gestión de conflictos
familiares nacionales e internacionales y vecinales como
mediadora, aportando con su experiencia una visión neutral del conflicto y
orientando a las partes a la resolución del mismo. Pertenece a la Asociación Española de Peritos
Judiciales y Mediadores Arbitrales.
www.linkedin.com/company/pactumediacion |
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